Cuando el escapulario se ha desgastado, puede reemplazarse por uno nuevo bendecido, pero no se tira a la basura.
Según la Congregación para el Culto Divino de la Santa Sede, el Escapulario del Carmen es un signo exterior de la relación peculiar, filial y confiada, que se establece entre la Virgen, Reina y Madre del Carmelo, y los devotos que se confían a ella con total entrega y recurren con toda confianza a su intercesión cariñoso; recuerda la primacía de la vida espiritual y la falta de la oración.
En el origen de este escapulario encontramos a la Orden de los Carmelitas, quienes, en el siglo XIII, experimentaron persecuciones y duras dificultades.
3. Identificación: finalmente, aguantar el escapulario es un signo externo de pertenencia a la comunidad carmelita y de identificación con sus valores y espiritualidad. Es importante resaltar que el escapulario no es un mascota mágico, sino un sacramental que nos ayuda a existir nuestra Certidumbre.
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Por otro lado, es necesario que el escapulario sea impuesto por un sacerdote de acuerdo a un determinado ritual.
Aunque en todas las oraciones dedicadas a la virgen del Carmen se encomienda la Vitalidad de los enfermos es esta la hecha especialmente para ellos, pues no se pide otro cortesía que no sea relacionado, con la Vitalidad o la escapulario de la virgen del carmen original enfermedad de alguna persona, o se hace una la oración pidiendo por todos los enfermos del mundo, para que les brinde sosiego a los dolores o decadencias que estén padeciendo.
El escapulario de Nuestra SeñO del Carmen, asimismo conocido como el Escapulario Carmelita, es un objeto Noble Internamente de la Certeza católica. Sus raíces se remontan a los Carmelitas del siglo XIII y se atribuyen a ella varias promesas y favores.
4. Identificación con la Orden Carmelita: La Virgen del Carmen es la patrona de la Orden de los Carmelitas. Al portar su escapulario, los fieles muestran su unión espiritual con esta orden y con sus ideales de oración, humildad y servicio.
En su bula llamada Sabatina, el papa Juan XXII afirma que quienes usan el escapulario serán rápidamente librados de las penas del purgatorio el sábado que sigue a su homicidio.
Es importante rememorar que el serio valencia del escapulario no reside en el objeto en sí, sino en la devoción y el el escapulario de la virgen del carmen compromiso espiritual que representa.
Se cree que los primeros ermitaños carmelitas que vivieron en el Monte Carmelo de Tierra Santa en el siglo XII llevaban una túnica con cinturón y un manto a rayas distintivo de los peregrinos; cuando los carmelitas se trasladaron a Europa a escapulario de la virgen del carmen original mediados del siglo XIII y se convirtieron en una orden mendicante de frailes, adoptaron un nuevo hábito que incluía una túnica con cinturón marrón, un escapulario marrón, una capucha convocatoria capuche y un veta blanco[3].
Lo que en la Hoy se conoce como escapulario no es igual a lo que representaba en la decadencia. Más admisiblemente podemos proponer que adquirió otro significado, se comparte el término para dos cosas.
En su forma original, el Escapulario es una parte del hábito monástico (el traje que llevan los monjes). Se compone de dos grandes piezas de tela, conectadas en el centro por unas tiras más estrechas, al igual que un delantal que cubre la parte delantera y la parte posterior del que lo usa.